Cómo mantener los dientes sanos
A muchos padres les resulta difícil juzgar qué cuidados dentales necesitan sus hijos. Saben que quieren prevenir las caries, pero no siempre saben cuál es la mejor manera de hacerlo. Aquí tienes algunos consejos y pautas.
Un buen cuidado dental comienza antes de que aparezca el primer diente del bebé. Que no se vean los dientes no significa que no estén ahí. Los dientes empiezan a formarse en el segundo trimestre del embarazo. Al nacer, tu bebé tiene 20 dientes primarios, algunos de los cuales están completamente desarrollados en la mandíbula.
Incluso los bebés pueden tener caries. Dormir a un bebé con un biberón puede dañar sus dientes. Los azúcares del zumo, la leche artificial o la leche que permanecen en los dientes del bebé durante horas pueden corroer el esmalte (la capa del diente que lo protege de las caries). Esto puede provocar “boca de biberón” o “caries del biberón”. Cuando esto ocurre, los dientes delanteros pueden decolorarse, llenarse de bolsas y picarse. Pueden formarse caries y, en casos graves, puede ser necesario extraer los dientes cariados.
Cuando los niños tienen 6 meses, pueden cambiar el biberón por un vaso para sorber (con pajita o boquilla dura). Esto ayuda a evitar que el líquido se acumule alrededor de los dientes del niño. Al cumplir el primer año, tendrán la capacidad motriz y la coordinación necesarias para utilizar el vaso por sí solos.
ملاحظات
Cepillarse y usar el hilo dental correctamente puede prevenir la placa (se dice: plak), una película transparente de bacterias que se adhiere a los dientes. Después de comer, las bacterias descomponen el azúcar de los dientes en ácidos que corroen el esmalte dental, causando agujeros llamados caries. La placa también provoca una enfermedad de las encías que puede hacer que éstas se enrojezcan, se hinchen y duelan.
Para prevenir las caries, tienes que eliminar la placa. Para ello, cepíllate los dientes dos veces al día y utiliza el hilo dental al menos una vez al día. El cepillado también estimula las encías, lo que ayuda a mantenerlas sanas y a prevenir las enfermedades de las encías. El cepillado y el uso del hilo dental son las cosas más importantes que puedes hacer para mantener tus dientes y encías sanos.
Si comes alimentos azucarados o bebes refrescos a lo largo del día, das de comer a las bacterias de tu boca. Las bacterias bien alimentadas hacen más probable la aparición de caries. Los caramelos duros, las pastillas para la tos y los caramelos de menta que contienen azúcar son especialmente perjudiciales porque se disuelven lentamente en la boca. Es mejor no comer alimentos azucarados entre comidas.
Los alimentos azucarados o con almidón que se toman con las comidas son menos perjudiciales para los dientes que cuando se comen solos. Esto puede deberse a que nuestra boca produce más saliva durante la comida, lo que elimina el azúcar y las bacterias. Comer alimentos azucarados antes de acostarse puede ser lo más perjudicial (sobre todo si no te cepillas los dientes después) porque no producimos tanta saliva cuando dormimos.
Higiene bucal ppt
Desde hace años, sabemos que una mala salud bucodental afecta a los niños provocando dolor, bajo rendimiento académico y menor autoestima. Los estudios han demostrado que las caries infantiles no tratadas pueden provocar dificultades para comer, hablar, aprender y jugar. Los niños que tienen problemas de salud dental faltan a la escuela con más frecuencia y sacan peores notas.
La importancia de un buen cuidado dental comienza al principio de la vida de su hijo. Las caries en los dientes de un bebé pueden afectar a su alimentación y nutrición, así como al desarrollo de la mandíbula y el habla. Un niño con caries puede sentirse ansioso cuando visita al dentista.
Si su hijo tiene malos hábitos de salud bucal desde una edad temprana, esto puede tener un efecto duradero. La salud dental afecta a todo, desde la alimentación, la dieta y la nutrición hasta el trabajo escolar y la productividad, la calidad del sueño, la imagen de sí mismo, la socialización y la calidad de vida en general.
Los hábitos de salud dental de los niños comienzan a formarse a una edad temprana, junto con otros hábitos relacionados con la salud, como una dieta adecuada y ejercicio regular. Del mismo modo que unos hábitos saludables de alimentación y ejercicio pueden evitar una vida de obesidad y sus complicaciones médicas, unos hábitos saludables de higiene bucal pueden mitigar tratamientos dentales complejos más adelante.
Salud bucodental
Cepillar los dientes de un niño es importante por muchas razones. Los dientes primarios mantienen la mandíbula de su hijo recta, mantienen el espacio para los dientes adultos, y juegan un papel importante en cómo los niños aprenden a masticar, sonreír y hablar. Tener unos dientes sanos también ayudará a la confianza y a la participación en su educación y vida social. Establecer unos buenos hábitos de salud bucodental desde el principio ayudará a fomentar unas pautas para toda la vida.
Si los dientes de su hijo se deterioran y tienen que ser extraídos, esto puede hacer que otros dientes se muevan, reduciendo el espacio para que salgan los dientes adultos. Si los malos hábitos orales continúan, es mucho más probable que sus dientes adultos tengan caries.
¿Cepillar los dientes de mi hijo y utilizar el hilo dental? Una buena regla es empezar a utilizar el hilo dental tan pronto como el niño tenga dientes que estén en contacto entre sí, normalmente alrededor de los dos o tres años. Una vez que los dientes llegan a este punto, las partículas de comida pueden quedar atrapadas entre ellos y fomentar el crecimiento de bacterias y el desarrollo de la placa. No todos los niños necesitan usar el hilo dental a esta edad, así que pida consejo a su dentista.