Protocolo urologia

Juicio de espina bífida

La Sociedad ERAS® – Capítulo de Urología se formó oficialmente en el Congreso Mundial de 2016 en Lisboa. El grupo fue presidido por el Dr. Yannick Cerantola (Suiza) hasta 2018 y ahora está presidido por la Dra. Sia Daneshmand (EEUU).

Con más de 500.000 nuevos diagnósticos cada año y 200.000 muertes, el cáncer de vejiga (CB) es una de las neoplasias malignas más comunes y letales en todo el mundo [1]. Una cuarta parte de los casos son de tipo invasivo muscular, con un riesgo significativo de mortalidad. Aunque es menos letal, la enfermedad no invasiva al músculo tiene un riesgo de recurrencia y progresión [2, 3]. Estos riesgos son mayores en pacientes con enfermedad T1, enfermedad de alto grado tras el fracaso de la terapia intravesical y en ciertas variantes histológicas [4]. Por lo tanto, el tratamiento del CB es agresivo, y la cistectomía radical (CR), la linfadenectomía pélvica y la derivación urinaria se consideran el tratamiento estándar para la enfermedad invasiva muscular, ciertas enfermedades no invasivas musculares de alto riesgo y tras el fracaso de la terapia intravesical o trimodal [4-6].

Si bien la CR permite mejorar la supervivencia a largo plazo, es una de las operaciones urológicas más complejas con riesgo de morbilidad perioperatoria. La duración de la estancia postoperatoria (LOS) se ha notificado hasta 17 días en estudios europeos y hasta 9 días en estudios de registro de EE.UU. [7, 8]. Se producen complicaciones en hasta el 60% de los pacientes y reingresos en el 30% [9]. La adopción por parte de los urólogos de protocolos de recuperación mejorada después de la cirugía (ERAS) ha mejorado drásticamente los cuidados perioperatorios de los pacientes sometidos a CR [10, 11]. Estos protocolos incluyen modificaciones preoperatorias, intraoperatorias y postoperatorias para mejorar la recuperación y reducir el estrés tras la cirugía. En 2013, la Sociedad ERAS publicó unas directrices para los cuidados perioperatorios tras la cistectomía radical [12]. Desde la publicación de estas directrices y la aplicación inicial de los protocolos ERAS, han aumentado las pruebas que apoyan el uso de ERAS después de la cistectomía radical.

Directrices de Eau

Se utilizarán efectos aleatorios y fijos en caso de presencia o ausencia de heterogeneidad, respectivamente.9 Se considerará estadísticamente significativo un valor p de dos caras<0,05. El análisis conjunto de las variables continuas sólo es posible cuando los datos se presentan como media y desviación estándar. Dado que algunos estudios pueden informar de las variables continuas en forma de «mediana» y «IQR» o rango «mín/máximo», utilizaremos un método matemático validado para estimar la «media» y la «DE».15 Cuando estén disponibles, utilizaremos los datos informados en forma de comparación de pares emparejados.El uso del efecto gráfico agrupado de un metanálisis que incluye ensayos controlados aleatorios (ECA) y no ECA permite evaluar la similitud entre los estudios. Los gráficos forestales permiten presentar las estimaciones y los errores estándar de cada estudio. La representación gráfica de los resultados agrupados se realizará en función de la heterogeneidad.9

A continuación, realizaremos un análisis de sensibilidad de la estimación agrupada de las características basales comunicadas por los estudios que informan de un resultado determinado para evaluar las diferencias entre las dos cohortes. Los análisis de sensibilidad se llevarán a cabo trazando sólo los trabajos que informen de estimaciones comparables de las características basales (diferencia de medias ponderada para la variable continua y OR para la variable dicotómica) definidas como estimaciones con un IC del 95% para el efecto incluyendo el valor nulo (como un OR de 1,0 o una diferencia de riesgo de 0).13

Protocolo de arbitraje espina bífida

La espina bífida es un defecto de nacimiento de la columna vertebral. Los daños en la médula espinal y los nervios pueden impedir que las señales del cerebro lleguen a la vejiga, impidiendo que ésta funcione correctamente. Cuando la vejiga no funciona correctamente, la orina puede retroceder hasta los riñones, pudiendo causar daños renales.

Muchos bebés nacidos con espina bífida tienen riñones sanos al nacer,1 pero corren el riesgo de desarrollar insuficiencia renal a una edad más temprana que los que no tienen espina bífida.2 El seguimiento y las pruebas periódicas desarrolladas a través del proyecto UMPIRE ayudan a identificar la enfermedad renal antes, lo que puede evitar que empeore.

A lo largo de la duración del programa UMPIRE, los investigadores y los médicos seguirán analizando los datos y publicando los hallazgos sobre el mejor estándar de atención para proteger los riñones de los recién nacidos y los bebés con espina bífida.

Vejiga neurógena

Resultados recientes: Los protocolos ERAS se han estudiado durante más de 20 años en diferentes procedimientos quirúrgicos, principalmente en cirugía colorrectal. El concepto de mejorar la atención al paciente y reducir las complicaciones postoperatorias se aplicó también a la cirugía urológica mayor y, en especial, al procedimiento de cistectomía radical. Este procedimiento es un reto técnico, debido a la gran resección quirúrgica y a la elevada tasa de complicaciones postoperatorias, que puede alcanzar el 65%. Se han introducido varias vías clínicas para mejorar el curso perioperatorio y reducir la duración de la estancia hospitalaria. Estos protocolos difieren de las modalidades de ERAS en otras cirugías. Las razones son el mayor tiempo operatorio, el mayor riesgo de transfusión e infección perioperatoria y la derivación urinaria conseguida mediante segmentos intestinales transpuestos. Los estudios anteriores en este ámbito analizaron la necesidad de preparación mecánica del intestino, la descompresión postoperatoria con sonda nasogástrica, así como la duración del drenaje urinario. Además, también se ha prestado atención a la optimización perioperatoria de los fluidos, el tratamiento del dolor y la función intestinal.